Dos marcas y dos personalidades sin ninguna relación entre ellos pero que han sido noticia: Aquarius y Elena Biurrún y Adidas y Mario Götze.

En el caso de Elena, fue seleccionada por la marca Aquarius para participar en su campaña «Políticos extraordinarios» que, en clave de humor, buscaba limpiar la mala imagen de éstos en nuestro país.

Elena, que aparece en el segundo 20 aproximadamente, se presentaba como una de las pocas políticas honestas en España, y como muestra, se afirmaba que «aparcó su coche oficial para ahorrar un dinerito a su Ayuntamiento».

Reconozco que la campaña nunca me gustó, pero es que además, ayer apareció la noticia de que esa afirmación era falsa (el que quiera que lea la noticia, no entraré a valorarla) así que ahora, la pelota está en el tejado de Aquarius. Sabe que cada vez que se emita esa campaña, al público le vendrá rápidamente a la cabeza la imagen de que eso que dicen, es mentira… un marrón para la marca, está claro.

Por otra parte, tenemos al Bayern de Munich con su nueva estrella Mario Götze. El Bayern cuenta con Adidas no sólo como patrocinador principal, con un contrato cercano a los 200 millones de euros hasta 2020, sino que la marca alemana es poseedora del 9,4 por ciento del club (Fuente: eleconomista.es). Götze, por su parte, tiene como sponsor a Nike.

Y con todos esos datos, llegamos a la presentación de Mario Götze como jugador del Bayern y a la que el jugador acudió así:

Foto: Mundo Deportivo

Es el segundo gol que Nike le cuela a Adidas en este mercado de fichajes, ya que Isco también apareció, con la misma camiseta, en el reconocimiento médico del Real Madrid (también patrocinado por Adidas).

El hecho ha molestado mucho a Adidas, «Las imágenes de la presentación de Mario nos han sorprendido muy negativamente. Contractualmente no es permisible porque es un acto oficial del Bayern de Múnich, que trabaja con Adidas», ha afirmado Oliver Bruggen, portavoz de Adidas (Fuente: grada360.com) y ha obligado al Bayern a reconocer su error y pedir disculpas públicamente.

Son dos casos distintos (el de Nike parece provocado, viendo que Isco llevó el mismo modelo de camiseta) pero que reflejan que, por mucho que la marca haga un esfuerzo enorme para asociar su nombre a una personalidad, el tiro puede salir por la culata.